La escritura no solo es sanadora para el alma, también es beneficiosa para tu salud.
Personalmente soy de las que piensa que cuando no escuchamos lo que nuestra alma necesita, el cuerpo se empieza a enfermar.
Seguramente habrás escuchado ese dicho que dice que el cuerpo es el reflejo de nuestra alma.
Cuando algo está creando conflicto en nuestro interior, esa emoción se manifiesta en el cuerpo en forma de estrés haciéndonos sentir irritables y ansiosos; se debilita nuestro sistema inmune haciendo que seamos más propensos a pillar enfermedades como gripes o resfriados con más frecuencia de lo que nos gustaría, y nuestro estado de ánimo empieza a variar dependiendo del día (y en algunos casos, incluso dependiendo de la hora), y hacemos hueco para que a nuestra vida lleguen enfermedades mentales tan peligrosas y poco exploradas como la depresión.
Pero, ¿qué tiene que ver con todo esto la escritura?
Escribir sana
La escritura terapéutica, expresiva o emocional (como también la puedes conocer) es una herramienta sencilla, gratuita y tremendamente terapéutica para tratar todos esos síntomas y situaciones.
Basta con tomar un papel, un boli y empezar a escribir todos los días de forma regular para crear el hábito y empezar a ver cambios que impacten en la manera en la que vemos la vida y, por ende, en cómo se manifiestan nuestras propias emociones y percepción del mundo en nuestro lado exterior.
Así que para que te animes y dejes de procrastinar tu cita diaria con la escritura, te quiero mostrar algunos de los beneficios que la escritura tiene para tu salud.
Escribir te ayuda a reducir el estrés
Cuando estamos ante situaciones que nos producen estrés como estar atascados en el tráfico y llegar tarde a una cita, falta de tiempo para terminar algún trabajo o tener que hacer muchas cosas a la vez, nuestro hipotálamo envía una orden al cerebro que básicamente activa la hormona del estrés, lo que a su vez produce en nuestro cuerpo un estado de lucha que genera efectos negativos para nuestra salud como una subida en nuestro ritmo cardíaco, una respiración acelerada, la contracción de nuestros músculos, dolor de estómago, tensión arterial alta y en muchos casos terminar en problemas de depresión.
Y puedes estar pensando que todos tenemos días estresantes de vez en cuando, pero lo malo es cuando no es uno o dos días, sino algo rutinario.
Por eso, una idea fácil de aplicar en nuestra rutina diaria es escribir. Reservar unos minutos al día (aunque sean 15) para practicar esta actividad de cuidado personal, sobre todo en momentos de estrés y ansiedad.
¿Qué tal si la próxima vez que estés atravesando una situaciones que te ponga cara a cara con momentos estresantes, sacas una libreta o las notas de tu móvil y empiezas a escribir?
La escritura fortalece tu sistema inmune
Según estudios, las personas que tienen el hábito de escribir un diario personal sufren menos de enfermedades virales como los resfriados y las gripes, y de otras condiciones físicas como la artritis reumatoide, las alergias, el asma y hasta el cáncer.
¿Por qué? porque el hecho de hacer catarsis en el papel y ponerle un nombre a nuestras emociones y sentimientos logran un efecto positivo en nuestro sistema inmune y por supuesto en nuestro cuerpo.
Y no lo digo yo, lo dijo el profesor de Filosofía, James Pennebaker, quien condujo un estudio sobre el tema y descubrió esto.
Mantiene tu cerebro activo
Me gusta pensar que la escritura es el gimnasio de nuestra mente. El lugar ideal para entrenarlo y hacer que siga funcionando de manera óptima. Solo con el hecho de reflexionar, estructurar y ordenar nuestros pensamientos, estamos trabajando nuestra memoria, concentración y mejorando nuestro procesamiento cognitivo.
Escribir nos ayuda a centrarnos en una cosa a la vez y desconectarnos del ruido del mundo y de todas las miles de actividades y responsabilidades que tenemos en el día, aunque sea por unos minutos. Y ni qué decir del estímulo tan grande que genera para nuestra creatividad.
Escribir mejora tu estado de ánimo de forma instantánea
Escribir hace que nos sintamos mejor. Si no me crees, pruébalo. Cuando estoy triste o siento que no sé cómo gestionar mis emociones, empiezo a escribir porque es mi manera favorita de entender mejor lo que me pasa y ser más consciente.
Cuando escribimos sobre lo que nos pasa, nuestro cerebro aprende a regular nuestras emociones y, según los psicólogos y esta servidora, funciona porque nos deja con una sensación de liviandad y felicidad que no teníamos antes de empezar.
En resumen, es una forma muy fácil y gratuita de mantener joven nuestro cerebro.
Si escribimos podemos dormir mejor y combatir el insomnio
¿Me creerías si te dijera que escribir por 15-20 minutos antes de dormir te garantiza una plácida noche de sueño? Según otro estudio de Psicología aplicada, escribir antes de irte a la cama, especialmente si utilizas la escritura para agradecer por todo lo vivido durante el día, te puede ayudar a experimentar un sueño más profundo, tranquilo y reparador. ¡Ser agradecidos tiene ese efecto relajante en nuestro cuerpo!
Así que ¿a qué esperas para empezar una lista de agradecimientos para terminar tu rutina nocturna?
Eso sí, todos estos beneficios son a largo plazo
Como dije al inicio, escribir es bueno para tu salud física y emocional. Pero como todo en la vida, estos beneficios se empiezan a mostrar en nuestra vida si los trabajamos. No ocurre de la noche a la mañana, los beneficios de la escritura pueden ser espontáneos en el caso de elevar nuestro estado de ánimo, pero tratar el problema de raíz como por ejemplo ser una persona más vibrante y feliz, es a largo plazo.
En resumen…
La escritura te ayuda a sanar el alma para prevenir que el cuerpo se enferme.
- Menos estrés y más estabilidad mental
- Mejor funcionamiento de nuestro sistema inmunológico y menos visitas al médico
- Presión arterial estable
- Un estado de ánimo que te haga sentir feliz y te ayude a mantener relaciones sanas.
- Un cerebro activo y juvenil
- Un sueño plácido
- Y una regulación constante de tus emociones
Con todo esto dicho, solo me queda hacerte una pregunta… ¿Cuándo vas a empezar? Si la respuesta es ahora mismo, échale un vistazo a mis talleres.